Sebastián Gordín
(Buenos Aires, 1969)
ver además:
La ciudad: arte y utopías
Sebastián Gordín
 
Estudia en la Escuela de Bellas Artes Manuel Belgrano, en la que se recibe de Profesor de dibujo en 1989. Ese año realiza su primera exhibición individual de pinturas en el Centro Cultural Ricardo Rojas de la UBA. En 1992, aparte de exponer sus cajas en el Casal de Catalunya, hace una intervención en la calle Florida frente al Instituto de Cooperación Iberoamericano (ICI). Allí coloca una mesa con una maqueta de ese centro cultural, en la que distribuye sus obras en miniatura y de la que realiza visitas guiadas a los transeúntes, a la luz de una linterna de minero puesta en su cabeza. Al año siguiente consigue hacer una exposición dentro de las salas del ICI.
En 1995 es invitado a participar de la Primera Bienal de Arte de Johannesburgo, Sudáfrica.
En 1996 presenta Gordinoscopio en la galería del Centro Cultural Rojas (UBA), que consiste en un grupo de cajas cuyo interior se visualiza a través de una mirilla, en donde se reproducen a escala reducida y con detalle diferentes ámbitos como piletas cubiertas, oficinas, escalinatas, etc.
En 1999 expone en la Galería Ruth Benzacar y en 2001 se presenta nuevamente en el ICI. En 2003 inaugura el espacio de la Fundación Telefónica en Buenos Aires, con Pequeños reinos. Desde 1988 participa en numerosas muestras colectivas en el país y en el exterior.
Gana el Premio Braque en 1994 y es becado por la Fundación Antorchas para participar del Taller de Barracas (1996). Realiza residencias en Francia, en Montflanquin en 1996, en donde concreta una muestra; en Marsella en 2001 y en Frac des Pays de la Loire en 2002. Recibe además el subsidio a la creación de la Fundación Antorchas (1997), la Beca del Fondo Nacional de la Artes (1998), el Segundo Premio Adquisición de la Bienal Nacional de Bahía Blanca (1999) y el Primero de la misma bienal en 2001. En 2004 obtiene el Premio Petrobras en la Feria Arte BA de Buenos Aires.
Sus obras, ya sean pinturas, cajas, maquetas o esculturas, desarrollan narraciones en donde realidad e imaginación, recrean el clima ingenuo y absurdamente amenazante de las películas de terror o ciencia ficción Clase B, a las que el artista es adepto. El universo infantil, sobre todo el de los juguetes, atraviesan sus obras, con el doble filo del humor y la nostalgia.